Chapter 98. Heartless

- Buenas, venía para una intervención en su especialidad.
- ¿Está seguro? La operación es costosa y tiene muchas pegas a corto y largo plazo.
- Soy consciente, pero mi situación es desesperante... lo necesito.
- ¿Ha probado terapias paliativas? Algún remedio natural tal vez...
- ¡Lo he probado todo! Por eso acudo a usted en última instancia para que me opere.
- ¿Conoce los riesgos?
- Cre-creo que sí...
- Veamos, la intervención es delicada, hay pocas probabilidades de éxito y en cualquiera de los casos nunca volverá a ser el mismo...

- Entiendo...
- De quedar bien podrá seguir con una vida normal, pero sufrirá seguramente ataques de apatía, ansiedad e incluso algunos complejos por su incapacidad para...
- Me hago cargo.
- ¿Está realmente seguro? Piense en su familia, amigos...
- ¡Basta! No hay calmante que pueda apagar este dolor, no hay antidepresivo que consiga calmarme ni placer que compense mi malestar... Quiero acabar con todo, es operarme o...
- Ya, ya, está bien. No es el primer paciente que me pide que le estirpe el tumor...
- Jeh... Es el primero que lo llama así.
- Sé muy bien lo que se pasa en su situación, lo he visto muchas veces y sí, de un tumor se trata la enfermedad. Un cáncer que se extiende rápidamente y se arraiga de tal manera que órgano que atrapa...
- Tengo miedo...
- Es normal, pero esperemos que la operación vaya bien.
- No, no es eso... Temo no poder volver a sonreír de verdad, pasarme la vida fingiendo, ser infeliz...
- Será infeliz, pero esa será su decisión, usted paga...
- ¿Podré conservarlo? Como recuerdo...
- Por supuesto, yo de vez en cuando observo el mío y trato de recordar cómo era... No hay nada más maravilloso.
- Está bien, estírpemelo. Quíteme el corazón, acabe con ése tumor que llaman amor...
- De acuerdo, firme estos formularios...


--------------------

Algunos creerán que la vida sería más fácil así y que ojalá pudiera hacerse... el problema es que nadie ve que hoy día se puede y de la misma forma. Sólo debes entregarte a alguno de tus demonios más profundos y firmar con lágrimas de sangre tu condena.

Por todos aquellos que quieren dejar de amar, por todos aquellos que lo hemos deseado o los que lo hemos conseguido.

Lo peor del cáncer, es que nunca sabes dónde ni cuando puede re-aparecer. ¿Dónde está el problema si dejas de tener un corazón donde pueda alojarse?

NaiT