Qué fácil es ayudar a ver a otros el camino correcto y qué complicado es tomarlo uno mismo... Con lo hermoso que podría ser predicar con el ejemplo y al final...
La norma es que resulta más importante luchar por la felicidad que buscar experiencias.
Es tan gratificante poderselo hacer ver a otros... pero entonces pienso ¿Dónde quedaron mis ganas de luchar?
Y aunque la respuesta a parece ante mí con claridad cristalina, reniego de ella, pues no me corresponde a mí, no me corresponde...
No todas las decisiones son fáciles, y menos cuando se tratan de personas, sentimientos y la felicidad de aquellos que te rodean. Partiendo del principio "el bien de mucho supera al de unos pocos" me veo en la posición de alejar mi avaricia y vanidad con tal de ayudar a quienes lo necesitan.
¿Qué ayuda necesita alguien que con dificultad encuentra las fuerzas para ilusionarse de verdad?
Ilusión, no esa breve sensación que dura horas o incluso días, no. Hablo de los sueños, las ganas, el fervor por lograr algo incondicionalmente.
Será que me he equipado con demasiadas condiciones en este tiempo.
Batallas perdidas que me han servido de escuela para al menos servir de provecho a los demás, para poder confiarles cómo encaminar su vida ante lo que se les presenta.
Parece estúpido, y tal vez demasiado sacrificado para no recibir nada a cambio a parte de palabras de gratitud. Pero siempre he sido así y algo tan arraigado es difícil de arrancar, no obstante no significa que no pueda dejar de actuar de esta forma. Cada vez resulta más exclusivo recibir la bendición de que aparte mi egoísmo por un momento y decida cambiar la situación.
En cualquier caso, soy como un veterano de guerra incapaz de oír hablar de las batallas que alguna vez libré.
Carcamal hediondo...
Pero en fin, como ermitaño de mis propios pensamientos sólo me queda esperar con paciencia el momento apropiado para volver a luchar, el momento en que exista alguien que realmente me necesite de verdad.
Ser feliz es fácil, sólo tienes que luchar y creer en cuanto quieres y deseas. En el momento que te detienes para condicionarte, sólo encontrarás pegas...
NaiT
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