Yo soy la luz que te arrastra a las sombras.
Déjame mostrarte, deja que mis garras penetren en ti.
Déjate contaminar y que mi veneno se extienda por tu ser.
Que mi influjo crezca en lo más profundo de tu ego para hacerte mío y así,
déjame alimentarme de ti en un festín de sensaciones inolvidables.
¡Siente el éxtasis de nuestras almas!
Déjame robar tu luz y la vida que emana de ella. Quiero sorber de tu aliento todo cuanto quede en ti, porque ahora que estamos en las tinieblas sólo me necesitas a mí.
...No hace falta más, nos tenemos el uno al otro...
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Príncipe, oh mi príncipe, ¿es a ti a quién debo lealtad?
Hazme de tu sangre uno más y tal vez así pueda confiar
en no ser traicionado por su majestad.
Tenga cuidado con las herramientas de las que depende...
Al fin y al cabo, sólo seré el único que te servirá incluso después de tu muerte.
NaiT
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