Blood Letters...

jueves, 8 de marzo de 2012

Aguas negras...

Lagunas... curioso nombre para denominar vacíos, espacios donde la consciencia y la inconsciencia se entremezclan para dar lugar al caos, la incertidumbre, el "olvido"...

Lagos negros de aguas profundas que pese a su tranquila apariencia guardan una turbia verdad, una verdad inalcanzable.

Soñar es el camino más sencillo para llegar al subconsciente, aquellos secretos que moran en lo más profundo de nosotros mismos, aquellos detalles minúsculos censurados por nuestra consciencia o simplemente dados por alto por nuestra propia seguridad.

Quién sabe si alguno de esos caminos me llevará a aquel rincón en el que el agua tome forma o tan solo muestre la claridad suficiente para conocer la realidad, esa que conozco por boca de otro pero que por mí mismo soy incapaz de recordar. ¿Cómo hacer mío un recuerdo que no puedo recordar?

Con esto no niego la veracidad, al contrario, simplemente quiero conocer con exactitud y lujo de detalles hasta donde alcance mi culpa para tal vez, algún día, concederme la redención aunque hoy por hoy la veo más que lejana. Tampoco busco perdón, no me lo puedo dar por el simple hecho de haberle fallado a alguien importante y por haberme fallado a mí mismo, a mi integridad, a la persona que soy y a todo aquello que creía poder contener o controlar. No me voy a poder perdonar, pero más duro se hará si tampoco puedo saber.

¿Vivir con la culpa y la incertidumbre? Bastante pesada es la primera...

Navegar en aguas turbias es complicado, hace falta un buen guía para ello y tal vez una preparación previa. Pero es lo primero que supe que necesitaba, no sólo para conocer una única noche, si no para sacar en claro todo cuanto se oculta bajo esta enorme mancha negra que invade mi mente.

Sé algunas de las cosas que me puedo encontrar, yo mismo las sumergí ahí, pero como en las profundidades de los mares y océanos... ¿Quién sabe qué clase de criaturas pueden ocultarse en los recovecos de las profundidades?

Parece que un lago no sólo se puede llenar con lágrimas no derrochadas o años de contención. Problemas tenemos todos en mayor o menor medida, complejos, temores, rabia... Y yo que creía que llorando lo podría secar...

Lo que empezó como una travesía más por los mares de la embriagadez trajo consigo no sólo una enorme laguna, la primera en mi historial, sino la laguna de mayor relevancia que me pudiera encontrar. Por lo que me oculta, por aquello que la compone, por lo que provocó en mí y por lo que hice...


Me alejé de las costas de la sobriedad como tantas otras veces pero sin siquiera imaginarme lo que me podría encontrar. Encararse a lo inimaginable, al peor de tus enemigos, a tu propio reflejo revestido con una mirada maliciosa, sonrisa espeluznante y tiránicas carcajadas de exceso de confianza quebrantando mi seguridad y llenándome de insuficiencia. Todos tenemos un lado oscuro con el que convivimos, mediamos y, a veces incluso, reprimimos.

Me gustaría llegar a comprender qué clase de arma de doble filo se oculta realmente en sueños completamente ajenos a lo sucedido, sueños pacíficos de hechos cotidianos o cargados de una misteriosa tranquilidad. Sí, soy desconfiado y más sabiendo lo que puedo llegar a hacer si bajo la guardia...


Dirán que siempre "podría haber sido peor" y no quiero ni imaginarme ése "peor". Pero cuanto mayor cordura recaudo pasados unos días más sensato considero dejarlo todo atrás, todo aquello que he perdido.

Sé que siendo como soy tarde o temprano recordaré, añoraré o necesitaré... entonces ¿es una solución?.

Una cita dice "al mal tiempo buena cara" y aunque hago esfuerzos titánicos para regresar a lo que se suponía mi "normalidad" lo antes posible, también intento extraer lo mejor posible es este descubrimiento, de esta experiencia...

Sonará absurdo e incluso ofensivo calificar la experiencia como "un ejemplo de 'frenesí' en Vampiro: La Mascarada" pero es la única forma que tengo de satirizar un poco la situación y hacerla más llevadera.

Ya han pasado unos días, recupero la "normalidad" bromeando cual autómata por inercia pero sintiendo a la vez que sigo siendo forzado a la hora de hacer algunas bromas, comentarios o poner ciertas sonrisas condescendientes. Será por rol pero he de mantener cierta "postura" para evitar preocupación innecesaria hacia mi persona.

Tal vez por estrés pero aquel malestar que procuro desviar de mi mente comienza a trasladarse a otros aspectos de mi vida... Espero que sea simple casualidad. En cualquier caso, ya tengo infusiones para comenzar a apaciguar esas aguas en las que pronto tendré que nadar.

Quiero respuestas y no soporto la espera... Paciencia, calma, tranquilidad y sobriedad... sobre todo sobriedad...

NaiT

No hay comentarios: