Blood Letters...

martes, 23 de diciembre de 2014

23 de Diciembre...

Si hay algo que me caracteriza a mí, y más respecto a la Navidad, es que siempre le encuentro alguna carencia, algún detalle que podría mejorar, algo que nunca ha estado ahí y que siempre he querido tener o, por el contrario, cosas que siempre están allí y me estorban...

Esta va a ser mi primera navidad totalmente solo, y espero que sea la última.

Al decir solo no me refiero a estar aislado en un zulo, alejado del resto de seres, y sin ningún tipo de contacto humano... Hay gente a mi al rededor, pero además de desconocidos, me son personas muy indiferentes y por las que nuestra única conexión común es el techo bajo el que vivimos...


Siempre he sentido un amor/odio por la Navidad, porque bajo circunstancias personales y un análisis intrínseco de la misma situación, estas fiestas son para bien y para mal una constante de contradicciones y a veces hipocresía... Pero lejos de ser cínicos, sólo resumiré que la vida misma se resume en eso, simple y llanamente.

Hay particularidades familiares que siempre han sido un factor crucial en mi crítica hacia estas fiestas. Por un lado, las tradiciones en mi casa (si se les pueden llamar así) han sido una parte brillante, cálida en estas fiestas... Reunirme con los tíos de parte materna y celebrar todos juntos la noche buena... En algunas ocasiones incluso el fin de año también lo pasábamos todos juntos, aunque de un tiempo a esta parte, ésta última se fue tornando más al ámbito de ocio y lúdico o inclusive de coto limitado.

El caso es que en todas esas noches buenas, además del riguroso bien estar que me agrada casi tanto como desagrada, dependiendo de las circunstancias y cómo se presente la ocasión, a medida que pasaban los años cada vez se acrecentaba ése vacío en mí, la soledad, la falta de "acompañante".

Supongo que el hecho de no tener alguien especial hace ver estas fiestas un poco menos bonitas...

También es cierto que hace años ya que en mi casa no decoramos con motivos navideños. Ya sea porque mi hermana se independizó (ella era la que siempre sacaba las cosas), luego yo estuve estudiando en Palma y mis padres se limitaron a lo más básico...

El espíritu navideño como tal se truncó, pero siempre quedaba algo y , es ahora que estoy lejos de todo aquello, que daría lo que fuera por un poco de ése espíritu truncado y tal vez por avivarlo de nuevo....

Estos últimos años, debido a mi edad y a la presencia de mis amistades como apoyo, el evento familiar se limitaba a un preludio de la fiesta, y por lo demás, días normales con mucha comida, dulces y algunos regalos...

Pero ahora que no tengo nada de eso, nadie con quién celebrar de verdad la Navidad ni el año nuevo... Ahora es cuando entiendo de verdad el valor de lo que tengo allá y que tanto me falta aquí.

Es muy típico por estas fechas hacer compromisos, tener propósitos de cara al año venidero...

Yo he cumplido algunos de mis propósitos del año pasado, pero esta vez creo que va tocando ser serio al fin y plantearlos de verdad, más allá de metas personales, han de ser deseos por cumplir de corazón.

Éste viaje a Manchester me está aportando más desarrollo personal del que podría haber imaginado en primera instancia... Pero todo tiene un precio.

Yo decidí sacrificar mis ahorros, estas fiestas sin amistades cercanas ni familia y todo por una experiencia, una oportunidad de trabajo y, mayormente, por mi cabezonería y empeño por algo sin tomarme el tiempo suficiente para llevarlo a cabo....

Las prisas por miedo a echarme atrás....

Al final veo que me echaré atrás, pero tal vez, de no haber venido, no sólo no habría visto las maravillosas cosas que hay aquí, no habría visto lo que había en mí ni lo que he dejado allí (en Menorca).

Tal vez si mis circunstancias aquí fueran otras, el peso emocional sería más ligero....


Espero que la lección haya calado bien en mis entrañas, no quiero volver a verme en una situación así y menos por propia voluntad, por exaltar mis deseos sin tomarme el tiempo suficiente para decidir adecuadamente el cómo y el dónde...

El precio ha sido muy elevado, económicamente. Lo que podía ganar también pintaba muy bien, pero he jugado y no ha salido bien, eso ha sido todo.

Todavía dejaré una semana más para ver si se cumple el milagro, además de comprobar si llegan las cosas que deberían estar al punto de llegar (se supone...).

Es muy curioso también, que el único vuelo directo a Menorca, sea lo más barato que he podido encontrar y el último vuelo que se hará a tal destino hasta nuevo aviso....

Tal vez sea una señal de que debo volver... Pero creí ver tantas señales falsas para venir aquí también...

El verdadero mensaje de Navidad, lo dejaré a disposición en Facebook.

NaiT

No hay comentarios: